Hace 9 años, empecé a buscar un colegio para mi hija, que en aquel entonces apenas tenía 4 años. Fui a visitar varios colegios de La Romana, y cuando crucé el portón del Colegio Saint John lo primero que sentí fue seguridad. Supe que esta era la escuela perfecta para mi niña. El Colegio Saint John es un ambiente familiar, la Directora Hilda Álvarez, con su experiencia, su sabiduría y su carisma, ha construido un entorno perfecto para el crecimiento de nuestros hijos. El nivel de educación escolar es alto, sobre todo por el inglés. Jamás pensé que un colegio tan lejos de mi país, pudiese satisfacer en pleno mis necesidades y mis expectativas.
Un alumno del Saint John no es solo un número, es una persona, es un niño que es acompañado por todo su proceso de crecimiento por su directora y todos los profesores que no solo trabajan en él, sino que educan y forman estos chicos de diferentes edades. El apoyo educativo, psicológico y emocional, sea para mi hija o para mí como madre, nunca ha faltado o fallado en todos estos años. Cuando mi hija, o el curso entero o yo, hemos tenido la necesidad de ayuda a nivel escolar o emocional, siempre la Directora y sus profesores nos brindaron a todos soluciones para mejorar. Hay algo que siempre he notado en Hilda, y es el amor por nuestros hijos, que son un poco suyos también; y este sentimiento se refleja en el empeño que ella en primera línea, y su equipo entero, ponen en educar a diario tantos estudiantes, prestando atenciones a las necesidades de cada uno de ellos como individuos, y considero esto super importante.
El Saint John es un colegio que no se limita a escolarizar a sus alumnos, sino que se empeña a diario en criar futuros adultos capaces de triunfar en la vida, en el mundo del trabajo, dando valores fuertes que van más allá de una lectura de un libro, un idioma bien hablado, un cálculo bien hecho. Ser parte de esta gran familia es un enorme honor tanto para mi hija como para mí que, como madre, veo los resultados del esfuerzo de cada uno de ustedes reflejados en las notas de Sofía y en su vida fuera del colegio.
Gracias por el empeño que cada uno de ustedes ponen en cuidar, educar y proteger a nuestros hijos.

El colegio se mantiene a la vanguardia, siempre implementando nuevas tendencias hacia el aprendizaje efectivo. Además de la educación, fomenta en sus estudiantes un pensamiento lógico que junto con las actividades extracurriculares que están incorporando, enriquecen aún más a nuestros niños para que tengan las herramientas necesarias. Así en el futuro con esta preparación académica y su esfuerzo, puedan llegar a ser líderes exitosos en lo que se propongan, para el bien de nuestra comunidad.

Llegamos a la familia Saint John en el año 2002, con nuestra primogénita Valeria, la vimos crecer y desarrollarse académicamente y seguimos la trayectoria con Gabriela y Daniela, el colegio ha sido su segundo hogar y parte fundamental en el crecimiento de nuestras hijas, ha sido fuente de valores, crecimiento académico y el apoyo en cada una de las etapas que nos ha tocado vivir durante la estadía de las chicas. Valoramos muchísimo la atención de nuestra querida tía Hilda y su equipo que en varias ocasiones hemos necesitado. Hoy ya nuestra primogénita cursa el 5to año de medicina hasta ahora manteniendo un alto índice académico, ha sido fundamental su paso por el colegio para lograrlo (palabras de ella). Como familia estamos agradecidos y el colegio Saint John sería siempre nuestra primera recomendación a los padres que buscan un lugar de aprendizaje de calidad y fundamentado en valores, respecto y excelente formación para sus hijos.